Los líderes Alemania, Francia e Italia, luego de su reunión en Berlín, advirtieron que las conversaciones formales con Reino Unido para negociar su retiro de la Unión Europea (UE) no comenzarán hasta que el país presente la petición formal de salida.
Angela Merkel, canciller federal alemana, acompañada por el presidente francés, François Hollande, y el primer ministro italiano, Mateo Renzi, destacó que no habrá conversaciones “formales o informales” con Reino Unido hasta que haya esta solicitud oficial.
La confrontación se perfila ya en el horizonte, porque el primer ministro británico David Cameron dijo que su país quiere iniciar primero conversaciones informales previas.
Una vez que esta ronda concluya, entonces Londres pedirá su salida oficial de la UE, según Cameron, quien pretende que Reino Unido obtenga el máximo de beneficios para sus intereses nacionales, y sólo entonces pediría la separación de la UE.
Merkel, Hollande y Renzi aclararon que el proceso está claramente descrito en el artículo 50 de la Carta Magna de fundación de la UE: el país que quiera salir deberá primero pedir oficialmente la salida y será a partir de entonces que se iniciarán las negociaciones.
Es claro que Reino Unido y la UE tienen posiciones diferentes en cuanto al momento de iniciar las negociaciones.
Merkel dijo que las negociaciones no se deben convertir en una partida con interrupciones, sino llevarse a cabo en forma continua.
Pese a que ninguno de los líderes de las tres mayores economías del mundo quiso hablar de plazos, los tres coincidieron en que los tiempos los marcó ya Londres, al anunciar que el sucesor de Cameron se eligiría en septiembre.
El encuentro esta tarde en la capital alemana, posterior a una reunión que la canciller federal mantuvo con el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, buscaba una postura común de cara a la cumbre comunitaria de dos días que mañana se iniciará en Bruselas.
Así, los tres líderes acordaron que, de forma paralela al llamado “Brexit”, se dé un nuevo impulso a la UE en los próximos meses en áreas como la migración, la lucha contra el terrorismo o la seguridad interna y externa del territorio comunitario.
Un segundo eje de su estrategia para los próximos meses girará, según Merkel, en torno al ámbito económico y abordará asuntos como la competitividad y el crecimiento.