El mundo de los negocios está construido sobre las decisiones que los directivos y los líderes de los equipos toman prácticamente todo los días. Sin embargo, no todas las elecciones que se toman tienen el mismo impacto o son igual de relevantes. Lo mejor siempre será decidir de manera estratégica, para que esto impulse a nuestra empresa, sea una marca o un retailer. ¿Cómo se puede lograr esto? En las siguientes líneas mencionaremos algunos de los principales lineamientos para conseguirlo.
Hay una frase muy conocida que es de gran ayuda en estos casos: la información es poder. Antes de tomar cualquier decisión, es importante contar con todos los datos sobre el tema, con la finalidad de que la elección que se escoja sea la más informada y sustentada.
En el mundo de los negocios, para informarse antes de tomar las decisiones adecuadas se puede recurrir a distintas herramientas, como el business intelligence, el big y small data, entre muchas otras. Por medio de ellas se pueden tratar los datos para conseguir conocimiento útil.
Antes de tomar cualquier decisión también es fundamental hacer un balance de los beneficios y de los perjuicios que podemos tener en cada una de las opciones que tengamos en mente. Hay ocasiones que una elección puede parecer la mejor, pero que implica algunos resultados o consecuencias que positivas, cuyo costo resulta considerable.
Sin embargo, al momento de tomar decisiones estratégicas es necesario no sólo considerar la información interna de una empresa, sino que también es importante tomar en cuenta lo que pasa en su exterior, para que sean mucho más completas.
Cabe destacar que para tomar una elección estratégica es importante tomar en cuenta todas las áreas involucradas en el tema, para que cada una de ellas no sólo aporte su conocimiento, sino también su opinión, pero desde su perspectiva.
