Aunque se habla de una empresa como una entidad uniforme y homogénea, lo cierto es que este tipo de entidades empresariales son más diversas de lo aparentan. El principal motivo de su diversidad radica realmente es los colaboradores que forman parte de las compañías. Ya sea por la formación, por su origen o por otra serie de cualidades, se distingue perfectamente unos de otros. En algunas ocasiones estás diferencias logran coordinarse para formar grandes equipos de trabajo, en otros casos sucede lo contrario, por lo cual es responsabilidad del departamento de Recursos Humanos saber coordinar y explotar a su personal para que trabajen a la perfección.
¿Cómo se puede lograr esto? Por supuesto, al momento de reclutar el personal la persona encargada de Recursos Humanos debe ser muy observadora tanto para detectar el talento que más conviene a la compañía como para distinguir las cualidades con las que cuenta cada persona, con la finalidad de saber dónde puede encajar mejor.
Otro punto que debe tener muy en cuenta el Departamento de recursos humanos es que debe generar equipos de trabajo que sean flexibles. ¿Qué quiere decir esto? Que los grupos no sean inamovibles, sino que permitan la movilidad de personal para que se puedan ver distintas opciones y ver cuál es la que funciona mejor.
Existen distintas guías de personalidad, además de perfiles por generaciones que nos permiten tener una cierta claridad sobre cuáles son las posible cualidades como las que cuenta una determinada persona que será entrevistada por el Departamento de Recursos Humanos. Si es el personal que se busca, entonces estás herramientas servirán para saber en qué equipo o cual parte de la empresa puede ser contratado (siempre acorde al perfil del candidato y al que está buscando la compañía).
Por supuesto, y no está de más recordarlo, el buen ambiente de trabajo y la empatía ayudan a generar buenos equipos de trabajo, por más diversos que sean los colaboradores que los integran.