Un producto se compone de distintos elementos, como el packaging que lo contiene, el embalaje en el que es transportado o el etiquetado con el que cuenta. Precisamente este elemento puede ser aprovechado por las firmas para realizarse promocionarse, lo cual sirve como un impulso para la marca en cuestión. Sin embargo, ¿cómo se puede hacer esto? En las siguientes líneas hablaremos sobre el tema y mencionaremos algunos de los principales puntos.
Primero habrá que comprender que existen distintos tipos de etiquetados. Por ejemplo, están las etiquetas que proporciona información para identificar la marca y registrar la compra, incluso con información requerida legalmente sobre el contenido. Pero también están las que se centran en presentar el nombre la firma, el producto, su historia, entre otras cosas. Estas últimas son las que se pueden aprovechar.
Por ejemplo, se pueden aprovechar las distintas caras visibles con las que cuenta un artículo para poner etiquetado de producto que destaque la marca.
A través del etiquetado de producto que se centra en la historia de la marca, se realiza promoción por medio de un storytelling sencillo y rápido de consumir y que será visto por las personas tantas veces como el número de ocasiones que utiliza el producto.
Otra manera de aprovechar el etiquetado y de realizar un storytelling se encuentra al destacar las ventajas del producto o sus propiedades. Esto puede servir como un gancho para que las personas consideren adquirir el artículo.
En el etiquetado del producto se puede colocar la marca o el logo, con la finalidad de incrementar el brand awareness de la firma en cuestión y su imagen logre permanecer en la memoria de los consumidores.
Sin embargo, es necesario escoger las caras más visibles y expuestas al público, con la finalidad de que las etiquetas estén a la vida de los consumidores en prácticamente todo momento.
