Recientemente Prada y Adidas hicieron oficial el lanzamiento de su colección colaborativa que en los siguientes días saldrá a la venta.
Dicho lanzamiento ha causado gran interés entre los clientes de ambas marcas, mismo que ha sido comunicado y promocionado a través de diversas estrategias de marketing, entre las que destacan campañas de relaciones públicas, publicaciones en redes sociales, posicionamiento en buscadores mediante acciones de SEO, entre otras.
Si bien estas marcas no solo las de mayor valor en su industria (pues Louis Vuitton y Nike son las de mayor valor, con 41,000 y 32,421 millones de dólares, respectivamente, según Brand Finance y Kantar Millward Brown), con esta alianza comercial ambas firmas han conseguido despertar interés en sus respectivos consumidores, además de impulsar una intención de compra
Te sugerimos: Adidas va por mercado de lujo, de la mano de Prada.
Cobranding, la estrategia protagonista
Ambas firmas, además de tener en común que pertenecen a la industria de la moda, otro elemento que comparten es su interés por llegar a nuevos clientes, lo cual hace ideal su trabajo colaborativo, también conocido como cobranding. Por tanto, ¿qué obtienen a través de esta estrategia?
Como se sabe Prada pertenece al sector de lujo, uno en el cual Adidas no figura, por lo que llevar a cabo esta colaboración y colección les permite a ambas establecer contacto con otros clientes potenciales, impulsar su engagement y aumentar su alcance, pues ahora los consumidores de la firma deportiva tendrán la posibilidad de acceder a productos premium, mediante una marca de consumo más masivo, lo cual se puede traducir en una mayor probabilidad de compra y de retención de nuevos y potenciales clientes.
En el caso de Adidas, esta marca, además de también entrar en un nuevo segmento de mercado y mejorar su engagement, también recibe como beneficio una concepción de firma premium, dándole la posibilidad no solo de llegar a consumidores de mayor poder adquisitivo, sino también de tener ahora la opción de vender sus productos a precios más altos y así abrirse paso hacia su incursión dentro de la industria de lujo, lo cual además favorecería su valor de marca.
De igual forma la exposición de las dos marcas se eleva, lo cual permite aumentar su alcance y con ello ser más competitivo, además de impulsar un mejor posicionamiento al interior de la industria a la que pertenecen, sin dejar de mencionar que productos de edición limitada provocan que los clientes respondan en menor tiempo, por lo que buscarán realizar una compra lo más pronto posible, conducta que beneficia la rotación de los productos de toda la colección.