Una de las estrategias insignia del marketing below the line es la activación, la cual se puede comprender como una acción diseñada para generar una vivencia en el consumidor y que, al mismo tiempo, conduzca su decisión de compra a través de una promoción de compra. No obstante, prácticamente todas las firmas realizan este tipo de acciones de mercadeo, por lo que el verdadero reto que se tiene al frente es el tener que incrementar el rendimiento que se está logrando con este tipo particular de campañas. ¿Cómo puede lograrse esto? Precisamente en las siguientes líneas abordaremos algunos de los puntos más importante sobre este tema.
Un modo de incrementar el rendimiento de una activación es a través de la medición de resultados y la evaluación de los mismos. Por medio de los indicadores, podemos evaluar de manera objetiva y concreta qué es lo que está funcionando y qué es lo que no está funcionando de manera adecuada. Una vez que se valoran todos los resultados que se han obtenido, es posible tomar decisiones estratégicas de negocio para saber qué es lo que debemos mantener y qué es aquello que mejor dejamos de lado.
La creatividad es una de las piezas más importantes al momento de trabajar con una activación y de querer incrementar su rendimiento. Al añadir un componente creativo a este tipo de estrategias de marketing es posible también agregar un diferenciador interesante, el cual le permita distinguirse clara y poderosamente de lo que realiza la competencia.
Para incrementar el rendimiento de una activación, es necesario analizar cuales y que circunstancias una promoción de compra resulta atractiva para el cliente, con la finalidad de integrarlo en la campaña y que pueda tener un mayor éxito. De este modo, se garantiza la compra por impulso que se espera de este tipo de acciones de mercadeo.