Del mismo modo que pasa con los seres vivos, las estrategias de marketing se encuentran en una constante evolución tanto para adaptarse a las cambiantes condiciones del mercado como para estar en consonancia con las necesidades, preferencias y gustos del público meta al que se dirigen. Una de las herramientas que ha cambiado considerablemente en los años recientes es la utilización de los artículos promocionales, los cuales han dejado de ser simples objetos en los cuales se colocaban imágenes o elementos para promocionar una firma, ahora se han convertido en productos relevantes y deseados por la gente.
Artículos promocionales como objeto de deseo
En su origen, los artículos promocionales eran simplemente productos funcionales para el público meta al que iban dirigidos. Sin embargo, dejaron de funcionar como componentes aislados. En la actualidad, los promocionales vienen diseñados de tal modo que se relacionan con contenidos de sus gustos y preferencias, por lo que se convierten en objetos de deseo para las audiencias.
Artículos promocionales como objetos coleccionables
Usualmente, una serie de artículos promocionales que una marca lanza en un momento dado se convierten en objetos de colección. Al público meta ya no le basta con tener uno u otro, sino que quiere tener todo el conjunto.
Artículos promocionales como accesorios útiles
A pesar de que estos materiales se han convertido en elementos sofisticados para fomentar el deseo y el afán de coleccionar de las personas, es fundamental recordar cuál es el corazón de este tipo de componentes de promoción: ser útiles para el público meta al que van dirigidos. Además de prestar atención en su estética y su temática, se debe considerar que es lo que el gente tiene por útil y que conservaría.
En cualquiera de los casos, al momento de realizar este tipo de materiales, es necesario hacer una profunda investigación de mercado, para encontrar los insights la hagan funcionar.