Las marcas, las agencias y las empresas por lo regular no realizan acciones al azar, sino que todo implica no sólo una cierta planificación, sino también una programación, con la finalidad de tener una guía en la cual basarse para trabajar no sólo de manera estructurada, sino para que los resultado se puedan cuantificar de una manera más sencilla y objetiva. Para esto es importante trabajar con lo que se conoce como plan de comunicación. ¿Cómo hacerlo? Veamos algunas importantes recomendaciones.
Como sucede en todo lo que se realiza en mercadotecnia, una de las primeras cuestiones que se tiene que establecer en un plan de comunicación es qué es lo que se quiere conseguir y a qué público estarán dirigidas las acciones que se quieren realizar. Dicho en otros términos, es necesario definir los objetivos (tanto generales como específicos) y el público meta con el que se estará trabajando.
Una vez que se tenga esto, es necesario revisar cuál es el presupuesto con el que se cuenta para llevar a cabo los objetivos que se han fijado para el plan de comunicación. ¿Por qué? Una vez que sepamos cuánto podemos invertir, podemos definir cuáles son los medios que utilizaremos para transmitir el mensaje, lo cual, a su vez, está relacionado con el plan de medios.
Ya que se cuente con un presupuesto asignado y aprobado, es importante fijar cuál es el mensaje que se quiere transmitir. ¿Qué es lo que se quiere decir? ¿Qué tono de utilizará? Son algunas de las preguntas que tomaremos en cuenta. Cabe destacar que el mensaje debe considerarse desde dos principales vertientes: la interna y la externa.
Ya que tengamos el mensaje que la marca o la empresa quiera transmitir, habrá que seleccionar cuáles son los canales que se usarán. Una vez seleccionados, habrá que adecuar el mensaje a cada uno de ellos, con la finalidad de que los resultados sean óptimos.
Como sucede en prácticamente cualquier planeación, es importante también fijar cuándo se llevarán a cabo dichas acciones, cuánto durarán, quiénes serán los encargados y la manera específica no sólo en que se realizarán, sino en que se medirán.