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Según datos de Statista, en 2019 Avon se hizo con 5 millones de representantes, en tanto que Natura logró tener 1.6 millones.
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Del 2011 al 2019, los ingresos de la firma pasaron de 0.23 a 4.76 MMDD, de acuerdo con información de la propia firma.
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La marca se encuentra entre las firmas líderes en México en el sector de productos de cuidados persona, con el 5.1 por ciento de la participación de ventas, por debajo de Palmolive con 10.3, según ProColombia.
Mary Kay, Jafra, Natura y Avon son algunas de las empresas que han destacado no sólo por su modelo de venta directa, sino porque han permitido que miles de personas en México se puedan autoemplear, con la finalidad de generar ingresos extra para sus hogares. Entre las principales cualidades de este modelo de negocio destaca la venta persona a persona, la cual se ha visto seriamente afectada por la emergencia sanitaria, ante la cual, la última empresa mencionada decidió reconvertir parte de su producción para hacer gel antibacterial y cubrebocas.
Con la finalidad de apoyar en las ventas a sus representantes, Avon a colocado estos productos en su catálogo, a pesar de que son de alta demanda; sin embargo, la marca misma ha comentado que 24 mil productos de gel antibacterial fueron donados a sus vendedores, con la finalidad de que destinarlos a su uso persona o pudieran venderlos para apoyarse con ingresos extra.
Cabe destacar que además de las medidas antes mencionadas, Avon también ha dispuesto de una serie de cursos en línea, con la finalidad de que sus vendedores puedan realizar la venta de sus productos a través de las redes sociales, como Facebook o WhatsApp, con la finalidad de que no se detengan sus ingreso, pero al mismo tiempo mantengan la sana distancia requerida en todo momento.
Sin embargo, uno de los grandes retos que enfrenta Avon en esta circunstancia es que muchos de sus vendedores no están familiarizados con el sistema digital, por lo que no se acomodan a hacer las ventas de modo que no sea presencial. Sin embargo, de acuerdo con Forbes, la pandemia hará que los negocios de todo tipo aceleren su digitalización dos años, por lo que pronto podría cambiar este esquema.