A medida que los consumidores de todo el mundo son cada vez más conscientes del impacto de los plásticos de un solo uso y otros materiales no reciclables, las empresas están tomando medidas para hacer que su packaging y procesos sean eco-friendly, tanto antes como después de la venta.
Y es que en medio siglo, los océanos han recibido más de 13 mil millones de toneladas métricas de plásticos, de los cuales solo vemos el 6 por ciento. El resto se encuentra en el fondo marino. En su mayoría, estos materiales contaminantes provienen de plásticos de un solo uso.
Packaging de todo tipo, empaques, envases de bebidas o contenedores de comida, los plásticos de un solo uso conforman el 40 por ciento de todo el plástico que se produce en el mundo. La buena noticia es que cambiar a un packaging eco-friendly es más fácil de lo que parece. Esto es lo que necesitas saber para tomar la decisión correcta para tu empresa.
A diferencia de los envases no reciclables (o difíciles de reciclar) como las bolsas de plástico, las cubiertas de poliestireno y las bolsas de chips compuestos o envoltorios de caramelos, un packaging sostenible produce poco o ningún desperdicio. En lugar de terminar en un vertedero o en el océano, los materiales ecológicos se descomponen nuevamente en la tierra o se pueden reciclar. Estos son los tipos de packaging eco-friendly más extendido:
Envases compostables
Los envases compostables están hechos de materiales que pueden desintegrarse en el medio ambiente sin liberar productos químicos nocivos. Por lo general, estos productos se fabrican sustituyendo polímeros con productos de desecho producidos naturalmente, como celulosa o pulpa de madera.
Paquete biodegradable
Los materiales de packaging biodegradable también se degradan al medio ambiente. Sin embargo, a diferencia de los materiales compostables que requieren un entorno específico (ya sea en casa o en una planta de compostaje industrial), los materiales biodegradables se descomponen de forma natural.
Envases reciclables
Los materiales reciclables pueden recolectarse y remanufacturarse para fabricar nuevos productos. Muchos materiales de packaging de uso común son teóricamente reciclables, pero en realidad terminan en un vertedero porque son complejos y consumen mucha energía para que los manejen los flujos de reciclaje convencionales. Los monomateriales, como el papel y el cartón metalizados, son 100 por ciento reciclables y su producción es energéticamente eficiente.
¿Cómo puedo encontrar el partner de packaging adecuado?
1. Haz tu investigación
Desafortunadamente, algunos materiales de empaque se comercializan como más sostenibles de lo que realmente son, en un proceso conocido como “lavado verde”. Para asegurarse de que estás obteniendo lo real, echa un vistazo al análisis del ciclo de vida de los productos potenciales y certificaciones que garantizan que los materiales provienen de “bosques administrados de manera responsable que brindan servicios ambientales, sociales y económicos beneficios”.
2. Ten en cuenta el diseño y los requisitos del producto
Los diferentes productos tienen diferentes requisitos en términos de rendimiento, durabilidad y diseño. Los materiales que entran en contacto con los alimentos deben cumplir con los estándares de seguridad, mientras que las marcas de eCommerce optan cada vez más por los “envases de experiencias”.
La buena noticia es que los materiales ecológicos han recorrido un largo camino y las opciones de packaging eco-friendly ahora ofrecen un rendimiento y un potencial de diseño comparables a los que contienen plásticos y materiales no reciclables.
3. Asegura la compatibilidad con tus procesos
Dar el paso hacia la sostenibilidad no tiene por qué significar una interrupción de tus procesos existentes. El papel metalizado es un monomaterial reciclable certificado que puede imprimirse y transformarse utilizando maquinaria convencional.
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