En el mundo hay una gran diversidad de personas, algunos con piel blanca, otros tantos de tez morena o negra según la región o la ascendencia; altos, bajos, delgados; pelo rizado, lacio, ¡y un larguísimo etcétera que tenemos de diversidad en este mundo!
Sin embargo, a pesar de lucir diferentes in the exterior, la realidad es que somos muy parecidos. En nuestro interior todos tenemos las mismas entrañas y cada órgano funciona bajo el mismo principio en cualquier cuerpo, sea alto, bajo, moreno o blanco, con el fin de mantenernos vivos y hacer actividades como ver, respirar, comer, defecar, caminar… ¡Vaya, estar vivos!
En el ámbito organizacional es muy parecido para las instituciones. Aunque existen diferentes tipos de organizaciones como el sector privado, el área gubernamental, asociaciones civiles e incluso las iglesias, cada una tiene un propósito diferente aunque trabajan bajo principios organizacionales similares.
Diferente carrocería, mismo combustible: la plata
El fin de toda la empresa es generar riqueza , ya sea que venda zapatos, aviones, consultas médicas, ofrecer seguridad… el chiste es producir dinero. De aquí una parte de la población se verá beneficiada ya sea con un empleo directo o indirecto, o bien, adquiriendo el producto o servicio.
Si bien es cierto que las asociaciones civiles, iglesias o el sector gubernamental no comparten el fin con el sector privado, el dinero es un pilar que sostiene a estas organizaciones al menos para aspectos básicos como el pago de servicios como agua, luz, telefonía e Internet.
En estas organizaciones aunque el fin no es generar riqueza, sí ayudan a la sociedad de diversas formas, por ejemplo ejecutando programas sociales o dando orientación sobre temas específicos… y para eso muchas veces el dinero es indispensable quizá para traslados, compra de insumos, pagos simbólicos, etc.
El dinero es esencial en cualquier organización sin importar su fin. Con él, las instituciones pueden cumplir el propósito por el cual fueron creadas.
Misma esencia
No importa el tamaño, giro de la organización o país de origen, todas funcionan bajo el siguiente modelo:
Este diagrama es la esencia de las funciones de cualquier organización. Evidentemente se adapta de acuerdo al tipo de organización o a su giro.
De aquí parte la creación de departamentos como Recursos Humanos, Compras, Ventas, entre otros. El nombre de cada área puede varias según la institución, aunque básicamente hacen lo mismo. No todas tienen los mismos departamentos, esto varía según el tamaño de la organización así como su giro.
Un solo timón
Diría un antiguo profesor: “no conozco un barco que tenga dos timones. Aun los más grandes buques tienen únicamente un timón que les da dirección ”.
Este ejemplo se aplica perfectamente en el ámbito organizacional. Existe una cadena de mando, el cual en términos simples es la existencia de una autoridad superior que distribuye la información hacia los subordinados y le reportan a esa autoridad todo lo relacionado con su trabajo. Aunque también está el tramo de control definido como una extensión de la cadena de mando que permite a la gerencia mantener el control, la eficacia y la eficiencia en el Trabajo.
El tramo de control se caracteriza por tener:
- Promedio de subalternos por jefe. Se define obteniendo el promedio de subordinados por cada jefe de la institución.
- Número máximo de personal. Es el número de subordinados que cada jefe puede dirigir en función a su complejidad, dispersión física y / o diferencia de disciplinas.
- Número de niveles. Establece los cinco niveles básicos de cualquier estructura:
- Coordinación
- Dirección
- Ejecución
- Supervisión
- Operación
Todo un mundo
Cada área del conocimiento científico es un complejo mundo. Lo mismo aplica con el Desarrollo Organizacional, lo mencionado con anterioridad son sólo los aspectos más básicos para ver las similitudes que existen entre los diferentes tipos de organizaciones.
Aunque sus fines sean diferentes comparten un código genético organizacional que permite entenderlas, estudiarlas y mejorarlas.
Si en la empresa, iglesia o asociación en el cual colaboras no cuenta con estos aspectos básicos, o los tiene aunque no son funcionales, se necesita un consultor de Desarrollo Organizacional para que ayude a enderezar el rumbo de ese buque.
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