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Apple se encuentra a la cabeza de las marcas más valiosas de tecnología en el mundo, al ser valorada en 309.53 MMDD, por arriba de Google con 309 MMDD, según Kantar.
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El gasto de los consumidores en tecnología alcanzó los 1.69 billones de dólares para el 2019, de acuerdo con datos de IDC.
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Según datos de Statista, para el 2018 los ingresos generados por la venta de dispositivos móviles alcanzó los 522 MMDD.
La mañana de este viernes, 15 de mayo, el gobierno de Donald Trump, presidente de los Estados Unidos, señalo nuevamente a Huawei con fábricas fuera de su país la creación de semiconductores con tecnología estadounidense, por lo que se anunciaron distintas restricciones. Ante este panorama y en una escalada en las hostilidades entre ambas naciones, China dio a conocer que está considerando tener también su propia lista negra de productos, en la cual estaría presente Apple, por mencionar un ejemplo, según dio a conocer Reuters.
Junto con Apple también estarían otras firmas como Qualcomm Inc y Cisco Systems, quienes, de concretarse la realización de la lista “de entidades no confiables”, también sufrirían una serie de restricciones importantes, además de que también se comenzarían investigaciones contra estas marcas, entre las que también está Boeing, a la cual no se le comprarían más aviones.
Cabe destacar que la información sobre la posible creación de la lista negra de China en la que se perfilaría Apple fue publicada en el Diario del Pueblo, el cual se considera como el medio oficial del Partido Comunista de China; sin embargo, de momento el gobierno no ha lanzado una postura oficial, aunque se considera que dicho medio muestra las opiniones de los mandatarios chinos.
Es importante mencionar que ya durante la cuarentena que vivió China por la pandemia de coronavirus COVID19, las ventas de Apple bajaron considerablemente, debido a que los consumidores tuvieron que reestructurar sus presupuestos para destinarlo a productos de primera necesidad, en lugar de dirigirlos a bienes duraderos.
Además de esto, Apple tuvo que cerrar sus puntos de venta en China durante la cuarentena, lo cual representó un freno más para los ingresos de la firma, la cual también padeció la falta de suministros para la creación de sus dispositivos.