“Chewbacca Mom” vino a rompernos el esquema. Una vez más, un video amateur y sin ninguna inversión en marketing digital, logra el éxito viral que muchas marcas anhelan. ¿Por qué?
¿Por qué muchas marcas que aún gastado fuertes montos para promocionar sus contenidos en medios digitales, no han logrado generar el número de views y más aún, el engagement que ha tenido Chewbacca Mom en pocos días? Por qué no han logrado todo ese buzzing mediático que en el caso del reciente video en cuestión, incluso ha sido muy bien aprovechado por personalidades como James Corden o el mismo actor detrás del personaje original, Peter Mayhew, y hasta por el director de la última entrega de Star Wars, J.J. Abrams. Sumémosle ese creciente número de oportunistas que han sabido subirse al efímero tren de la comunicación viral que experimentamos hoy en día.
Por si fuera poco, la euforia que el contenido creado por Candence Payne (la ahora famosa Mom Chewbacca) también hace sonar la caja registradora de Disney, pues la peculiar máscara de juguete se ha vendido como pan caliente y sus existencias están agotadas en los puntos de venta. El valor de marca que ha generado en redes para la compañía de entretenimiento también la tomó por sorpresa y la simpática mamá simplemente saltó del anonimato a la fama mediática en literalmente… unas horas.
Pero lo más emocionante es que si analizamos detenidamente el video, nos regala una serie de lecciones que debemos recordar siempre que pensemos generar contenidos:
- Originalidad es Volver al origen. Es una gran frase del gran Antoni Gaudí. Observemos bien, en el video no interactúa un niño (quien sería el target natural del juguete en cuestión). es una madre de familia, quien además muestra la emoción propia de una niña pequeña ante el regalo que se hizo. Nos lo enseña emocionada y además nos hace cómplices de un hecho que no es normal en una señora de su edad, pero que ella disfruta de manera natural. Se ríe de sí misma y encuentra una acción divertida que la saca por un momento y “a escondidas” de su vida cotidiana. Todo esto nos llama la atención, muestra un comportamiento que perdemos con los años por el cuidado las formas y por comportarnos maduramente, pero añoramos en nuestro interior.
- Si es Sencillo es mejor Digerido. Lo que tiene valor es la esencia del mensaje y no sus adornos. Es un mensaje simple, sencillo y fácil de asimilar por cualquier persona. No va dirigido a un segmento de mercado en especial, la acción por sí sola es apta para cualquier persona, sin importar edad, región, cultura o creencias. Es una acción universal y disruptiva para casi todos nosotros.
- Incluye un poco de misterio. Funciona en la literatura y en el cine. Observen que no muestra la máscara desde el principio, de manera natural da una introducción escueta a la acción que realizará y al ser algo inusual para una mamá, el tema nos intriga aún más. Pero no es tan fácil, si no se hace de la manera adecuada, el video puede resultar aburrido y ser ignorado en los primeros segundos de exposición. En este caso, aunque la fase de misterio me pareció un poco larga, el encanto natural de Candance ayuda a que esperemos un poco más para ver qué sucederá.
- Sé cercano. Es un video sin mayores presunciones pero con un mensaje claro, donde la protagonista nos involucra en su travesura y actúa de manera natural y jocosa. No muestra una marca con un mensaje acartonado, sino un juguete que es empleado de manera divertida e inesperada al tratarse de una persona mayor.
- El éxito llama a más éxito. Aceptémoslo, muchos de nosotros ni siquiera lo hubiéramos visto e incluso tenido noción su existencia si no fuera porque leímos o nos enteramos de que había roto récords en Facebook. Entonces, quisimos descubrir qué tenía de especial el video para ser tan popular y lo vimos, contribuyendo con ello a incrementar las cifras. Gracias al gran impulso de los medios masivos, el contenido se ha catapultado exponencialmente.
