Un término que vino acompañado del comercio electrónico y sobre todo del sector e-tail es el webrooming. Aunque el prefijo de la palabra da por sentado que tiene que ver con el Internet, no todos conocen de qué se trata exactamente.
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El webrooming es una tendencia de los consumidores que alude a la búsqueda de información o descripción de los productos y tiendas en Internet.
Es muy similar al efecto ROPO, que se refiere al vaivén de la tienda online y física, sólo que en el webrooming la compra se efectúa siempre en la tienda física, debido a la confianza en los pagos y sobre todo a la posibilidad de tocar los artículos e interactuar con algún vendedor que complemente la infamación recabada en la esfera digital.
De acuerdo con el portal Shopify, en Estados Unidos el 69% de las personas hace webrooming, mientras que el resto hace showrooming, que significa lo contrario al webrooming, esto es, que en la tienda física prueban el producto para luego comprarlo en línea.
Una de las definiciones más conocidas del webrrooming es la que dio el Dr. Gary Edwards:
“Webrooming es el comportamiento opuesto de showrooming. Al hacer showrooming, los vendedores se encuentran con el desafío de que los clientes sólo llegan a la tienda a buscar y probar el producto, para posteriormente ir a casa y comprarlos en línea (a menudo con marcas competencia). Webrooming, por otra parte, es cuando los clientes buscan los productos en línea antes de acudir a una tienda física para una evaluación final, y luego realizar la compra”.
