Coca Cola se ha convertido en una lovemark gracias a sus estrategias marketing, pues en ellas despliega creatividad, innovación y calidad con la finalidad de reforzar su engagement con los consumidores o de atraer nuevos seguidores.
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Sin embargo otro de los factores que ha implicado el éxito de esta refresquera, es su packaging que con el paso de los años se ha mantenido casi intacto, y que es reconocido a nivel mundial, pero muy pocos o casi nadie sabe la historia del por qué de la figura de su botella.
En el libro, “Design to Grow: How Coca-cola learned to Combine Scale and Agility (and How You Can Too), el vicepresidente de innovación de la compañía, David Butler y su coautora Linda Tischler, explican el origen del packaging de esta marca.
En 1915, el empresario Asa Griggs Candler, socio mayoritario de la compañía, lanzó un concurso para diseñar el nuevo modelo de la botella, con el que buscaba diferenciarla del resto de sus competidores.
Uno de los requisitos, es que el nuevo embalaje tenía que poder ser producido a gran escala y con la tecnología que se contaba en ese momento.
Uno de los participantes fue la Root Glass Company, quien basó su diseño en la planta del cacao, gracias a que a su director Earl R. Dean, le llamó la atención su forma y fue de ahí donde surgió la idea.
Ellos fueron los ganadores obviamente y 5 años más tarde, Coca Cola era identificada gracias a su packaging. “Esta botella se ha convertido en uno de los objetos más reconocidos del Siglo XX, en más de 200 países”, señalan los autores del libro.
Aquí en este link podrás ver la evolución del packaging de Coca Cola
