Con el propósito de mantener su filosofía de empresa socialmente responsable, Cabify anunció su adhesión al Pacto Mundial de las Naciones Unidas.
A través de su incursión en dicho pacto, la compañía de servicio de transporte privado podrá llevar a cabo prácticas empresariales que contribuyan a que el sector corporativo sea cada vez más sustentable, así como social y económicamente inclusivo.
Antes de formar parte de este convenio a nivel global, impulsado por la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Cabify ya había emprendido una serie de acciones.
En los últimos meses esta empresa puso en marcha su departamento de Responsabilidad Social Corporativa (RSC), el cual tiene como objetivo volver tangibles la misión y visión de Cabify a través de la creación de políticas, programas y actividades que surtan un efecto positivo en las personas, medio ambiente y comunidades.
David Pérez, Director Global de RSC de la compañía mencionó que su estrategia está orientada a desarrollar alternativas de movilidad que impacten positivamente en el bienestar de la población, además de que esto representa una palanca que potencia y mejora sus procesos, ayuda en la toma de decisiones y minimiza los riesgos que su servicio genera no solo en las zonas donde opera, sino en más lugares.
Mediante este pacto, Cabify se une a alrededor de 13,000 entidades firmantes, con presencia en más de 160 países, mismos que se rigen bajo 10 principios básicos y fundamentales, tales como minimizar el impacto ambiental consecuente de su operación, involucrarse con los problemas de la comunidad y el tejido social, capacitación a sus empleados, entre otras.
Al día de hoy, esta marca proveedora de transporte privado opera en 41 ciudades de América Latina, España y Portugal, misma que cuenta con 1,200 colaboradores directos.
Por su parte, Uber tiene a México y Brasil como sus dos mercados en Latinoamérica más importantes. Solo en nuestro país esta empresa tiene a 250,000 socios conductores y cerca de 8 millones de usuarios.