Mi padre es abogado, he vivido en medio de sus particularidades y del “estilacho” propio de sus colegas, al principio es de dar miedo por los términos, si los doctores asustan, los abogados no se quedan atrás.
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En los múltiples empleos de mi padre y en su despacho, descubrí que existen expedientes secretos que se hacen sin la consultoría de un experto en marketing, pero que se llevan “al pie de la letra”. Al parecer los abogados utilizan la misma lógica que emplean para sus casos, en materias como relaciones públicas, ventas, marketing directo, publicity y organización, si algo he visto en los profesionales del derecho es la rigurosidad con la que se dirigen en sus procesos.
Otro punto es la oralidad y escritura, el abogado es un defensor, su voz e inteligencia son las armas que utiliza, pero no sólo es eso, la actualización es crucial, le he consultado a mi padre la razón por la qué adquiere el mismo libro cuando sale la nueva edición, el motivo es obvio, porque la ley cambia y todo radica en interpretarla para que se encuentre de nuestro lado.
De igual manera, los que estamos inmersos en el marketing sabemos lo importante de la actualización, ‘renovarse o morir’ es un concepto que no espera a una edición de libro o promulgación de ley, la mercadotecnia avanza con permiso o sin el.
Dentro de las cosas que he visto aplicar, les comparto algunas:
1- Cadenas de aprendizaje, los novatos aprenden de los experimentados y avanzan según lo que denomina ‘colmillo’, en marketing lo estamos obviando por la aparición de algunos casos, lo malo es que a la larga el éxito no tiene buenos cimientos.
2- Horarios, expedientes y citas, de mi padre aprendí que el orden lleva más lejos a la creatividad. Aprendí a cobrar por mis consultorías, a armar expedientes y testigos de mis cuentas, a llevar una agenda diaria de actividades.
3.- Permitir las alianzas, las asociaciones en los abogados dan signo de prestigio y poder, el nombre de un tipo que ha sido fregón se convierte en un referente para los clientes, la firma es entonces la unión de varios abogados, pero a la vez una marca con fuertes tributos ante sus públicos.
4- Demuestre calidad por medio de sus códigos de poder, la oficinas están diseñadas para encaminarse al segmento que se desea atender, la manera de vestirse, las tarjetas de presentación, las hojas con membrete, su automóvil.
5.- Pasión y liberación, el abogado al igual que el merca, tiende al drama, uno al drama de las películas de la Ley y el Orden, el otro al drama de la película The social network, los primeros saben que la pasión debe estar regulada pues mientras que un caso van directo al cuello contra un colega, en el otro puede ir de la mano, aprender lo anterior es tarea del merca, cazarnos con los proyectos y marcas debe ser un acto de entrega, pero la entrega estará hasta que de la otra parte tenga los mismos términos. Aprendamos también a liberarnos de clientes que nos cuestan más de lo que nos dejan.
Me gusta mucho el mundo de los abogados, su trabajo es de ajedrez, de presión, de generar la máxima confianza a sus clientes, tal vez por eso le veo tanta similitud a lo que hacemos desde este lado de la raya.
Sí usted es uno de ellos o conoce alguno, comparta un punto extra.