Entre las ligas deportivas a nivel global, la National Football League (NFL), es una de las más importantes. Tan solo de 2018 a 2019, el valor de esta liga como franquicia pasó de los 2,570 a los 2,860 millones de dólares, según Statista.
Aunado a ello, la NFL también es propietario del evento deportivo más valioso del mundo, es decir, el Super Bowl, el cual supera a otros de mayor escala, en términos de inversión y actores involucrados, como son los Juegos Olímpicos. Datos también de Statista muestran que, solo en 2017, este evento registró un valor de marca de 663 millones de dólares, cifra que superó los 419 millones de dólares que reportaron los Olímpicos.
Este valor de la National Football League, así como su popularidad se han visto impulsados, en gran medida, por cada uno de sus equipos y las diferentes acciones de comunicación y marketing que llevan a cabo. Sin embargo, no siempre se puede conservar un buen branding o promoción de marca, y más cuando aficionados cometen actos inapropiados.
Tras el encuentro entre los Bears de Chicago y los Cowboys de Dallas, partido en donde los vaqueros resultaron victoriosos, varias personas fueron protagonistas de una riña, conducto que fue presenciada por decenas de aficionados y que ahora circula a través de redes sociales, en donde también se percibe cómo otras personas tratan de calmar a los agresores y así terminar la pelea.
Si bien este tipo de situaciones no es exclusiva del futbol americano-por desgracia-, sí causa extrañeza dado que la afición de este deporte no suele tener este tipo de comportamiento.
Mientras tanto, con estas acciones, tanto los equipos como la propia NFL ven vulnerado su branding, además de que pueden verse obligados a manifestarse respecto a lo sucedido, aún cuando ni jugadores ni la liga estén propiamente involucrados o hayan sido parte de la riña.
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En términos de valor de equipo, los vaqueros son el más valioso de la liga, pues a la fecha es de 5,500 millones de dólares; mientras que los Bears de Chicago se ubican en el lugar siete con 3,450 millones de dólares como valor de marca, de acuerdo con Forbes.
En el futbol soccer mexicano la violencia se ha vuelto uno de los protagonistas en varios partidos. Estadios como el de la Chivas del Guadalajara, Azteca, el de Pumas de la UNAM, el de Monterrey, entre otros han sido sedes de varias peleas que han iniciado al interior del inmueble, y que culminan incluso a las afueras del lugar, lo cual lejos de beneficiar al deporte, la imagen de las porras y equipos y su seguridad, solo las ponen en riesgo.