La madrugada de este miércoles fueron detenidos varios dirigentes que pertenecen a la FIFA, por cargos federales de corrupción. Hecho que sin duda es un golpe directo a la reputación del órgano mundial del fútbol.
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De acuerdo con el The New York Times, las autoridades suizas arribaron al hotel Baur au Lac, donde los dirigentes se encontraban para llevar a cabo su encuentro anual. De una manera pacífica, los dirigentes de la FIFA fueron extraditados a Estados Unidos.
Hay que destacar que durante décadas, la participación de las ofertas para las Copas del Mundo, así como la comercialización y difusión de estas ofertas de la FIFA ha sido puesta en duda y no es la primera vez que se alegan actos de corrupción en torno al órgano mundial del fútbol.
Estas versiones y sobre todo las detenciones de este miércoles han sido un duro golpe para la FIFA, la cual ha visto mermada su reputación de marca también en las redes sociales donde ya se le acusa de soborno y corrupción.
Según el diario estadounidense, fueron detenidas 14 personas por cargos que incluyen extorsión, fraude electrónico y conspiración de lavado de dinero.
Además de los funcionarios de fútbol de alto nivel, la acusación también concierne a ejecutivos de marketing deportivo de Estados Unidos y América del Sur, quienes son acusados de pagar más de 150 millones de dólares en sobornos y comisiones ilegales a cambio de ofertas de medios asociados con los principales torneos de fútbol.
Los dirigentes del fútbol acusados son el Sr. Li, Jeffrey Webb, Eugenio Figueredo, Jack Warner, Julio Rocha, Costas Takkas, Rafael Esquivel, José María Marín y Nicolás Leoz.
En tanto, los ejecutivos de marketing deportivo acusados son Alejandro Burzaco, Aaron Davidson, Hugo Jinkis y Mariano Jinkis.
Acorde con Reuters, aunque la investigación es una amenaza al personal branding de Joseph Blatter, presidente de la FIFA, un portavoz de la organización dijo que Blatter permanece sereno a pesar de las detenciones de los funcionarios antes mencionados.