Big Data, este concepto lo escuché de uno de mis clientes hace relativamente poco tiempo. Es un producto de inteligencia de mercado que se vende para ayudar a tomar mejores decisiones de negocio a las marcas, como por ejemplo, dónde abrir un nuevo retail o tienda de conveniencia, cómo esta la demanda de tu producto y así llenar de forma adecuada tu estante, sin pérdidas de almacenamiento o multas de los grandes almacenes porque no tienes producto disponible.
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También el Big Data, de acuerdo a tu comportamiento y vida digital te puede decir a ti mismo tu lado B. Muchas veces creemos que tenemos una identidad como clientes y la realidad es otra, ¿Crees que no te gusta la aventura? Pues quizá estés equivocado. El Big Data te puede decir lo que realmente eres, con base en algoritmos detallados que son poemas numéricos y estadísticos que nos ayudan a conocer mejor la realidad. En poco tiempo sabremos más del Big Data y será parte muy normal de nuestras vidas, pronto la vida privada sólo se verá reducida a las puertas de nuestro hogar -quizá menos- y lo demás será una vida sumatoria de algoritmos que nos dirán, con mucha realidad lo que somos. Sólo un algoritmo de rutinas, un libro abierto de costumbres que dicen quiénes somos en realidad.
