Una de las estrategias de negocio más rentables es participar en acciones sociales, esto con el objetivo de tener una imagen positiva frente a los públicos meta. Así que para sumarse a este modelo de responsabilidad social empresarial Avon lanzó una campaña de marketing para ayudar a parte de su target en problemas de violencia doméstica.
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En un contexto en el que existen más de un millón de mujeres que sufren agresiones físicas en Brasil, Avon decidió lanzar un programa de marketing social al que llamó The 180 Makeup line, de la mano de la agencia creativa NewStyle.
La estrategia consiste en hacer uso de los recursos de la marca para llegar a más consumidoras e invitarlas a apoyar a otras mujeres que son agredidas físicamente, pero sobre todo crear awareness de la situación que aqueja a muchos hogares y que impide que las féminas se sientan seguras en su propia casa.
Así que, con ayuda del Instituto Avon, se estableció una comunicación integral alrededor de este problema social y se realizó una campaña fuertemente below the line, a través de billboards, mupis, redes sociales, la fuerza de ventas de Avon y sobre todo, el diseño especial del catálogo en el que se transmitió el mensaje de que la violencia no puede maquillarse con ninguno de los productos que comercializa la marca.
