Recientemente se ha llevado a cabo el Foro Económico Mundial, en Davos, en el cual se congregan empresarios, políticos y estudiosos de la economía sobre los temas más trascendentes e importantes del panorama económico actual, así como los temas que se relacionan con ello, por ejemplo, la generación de empleos. Uno de los aspectos más inquietantes que surgió en el evento de 2018 es que para 2025 se perderían cerca de 75 millones de trabajos por la automatización y digitalización de algunas tareas y aunque se ha mencionado que se generarán muchos más, ¿qué pasará con las personas que de primera instancia se queden empleo?
Si bien muchos de los trabajos se perderán por la digitalización y la automatización, lo cierto es que se calcula que surgirán 133 millones más, los cuales estén orientados a, por ejemplo, la minería de datos o el procesamiento y análisis de información.
Esto parece una opción interesante para las generaciones jóvenes; sin embargo, muchas personas de otras edades (como los baby boomers) no están tan familiarizados con las innovaciones tecnológicas, mucho menos con conocimientos especializados, por lo que difícilmente podrán conseguir otro empleo.
También se ha mencionado que tareas como las de los periodistas o comunicadores posteriormente podrán ser realizadas por inteligencia artificial bien entrenada. Carreras como humanidades perderían salidas laborales, por lo que también muchos profesionales que se dedican, por ejemplo, a la generación de contenidos, tampoco tendrían alguna certeza de encontrar otro empleo.
Es necesario que las empresas, más allá de optimizar procesos y maximizar las ganancias sean conscientes sobre este aspecto. Si muchas personas se quedan sin salidas laborales, evidentemente no generarán ingresos, por lo que es posible que el consumo se comience a estancar, lo cual tendrá una repercusión importante en los ingresos y las ventas que generen las compañías en un futuro.
