Después de disfrutar el 6 de enero la deliciosa rosca de reyes, llega el momento de “pagar” si es que nos tocó el niño Dios. El día de la candelaria es el 2 de febrero, y como es costumbre en México, se celebra comiendo tamales acompañados de atole.
He de confesar que me parecía muy rara esta combinación cuando llegué a México. Sigo sorprendido como pueden comer un tamal o una torta de tamal y tomar una bebida que también lleva harina. Es una “bomba” (sin ofender!) que suele jugar el rol de desayuno a lo largo del año para muchos mexicanos. Veremos en esta columna algunos datos interesantes del consumo de atole en los hogares mexicanos.
El mejor mes de venta del atole es enero (claro para prepararlo el día 2 de febrero, se adquirió previamente).
Si lo vemos a total año, la harina para preparar atole es comprada por 7 de cada 10 familias mexicanas en un año.
¾ partes de la harina de fécula de maíz que se compra es de sabores. El sabor preferido es el de fresa, seguido de vainilla y chocolate. La que no tiene sabor, además de utilizarse para hacer algunas bebidas, se utiliza para varias preparaciones como galletas, como ingrediente básico de la crema pastelera o para espesar cremas (sopas); incluso se usa como remedio casero (para las rozaduras de los bebés entre muchos otros usos).
Pero regresando al uso tradicional de cocinar, quienes más compran este polvo para preparar atole son las familias con más de 5 integrantes, las familias donde el ama de casa es mayor de 50 años. Los consumidores más intensos son los hogares con niños menores de 5 años y también las familias donde los hijos son mayores de edad. En cuestión de niveles socioeconómicos, son los hogares más humildes de nuestro país quienes más compran para preparar en casa esta cálida bebida, concentrados fuertemente en el centro y sureste del país
Está muy a la par su venta en autoservicios y la tiendita. Alrededor del 40% del volumen que se adquiere de esta categoría se adquiere en un autoservicio y otra cifra similar en una tiendita.
Muchas veces se compra acompañada: en la mitad de las ocasiones que se compra, también los shoppers se llevan leche y en un 35% se llevan refrescos.
Es una categoría muy consumida en nuestro país, clásica en estos días y parte básica de la dieta de un mexicano. Espero que puedan disfrutar de un rico atole con una deliciosa torta de tamal en estos días…pero sin abusar, por favor!!!