El cierre de tiendas en el último año en Estados Unios dio paso a proyecciones desastrosas. Sin duda, el sector estadounidense, ha registrado cambios dirigidos, principalmente, en el impulso de tiendas online.
En suma, la influencia de los dispositivos móviles ha generado el surgimiento de una oferta digital cada vez más complementaria a los establecimientos físicos.
La firma de investigación de mercados Forrester Research en su reporte 2018 Retail Best Practices: Mobile Web, señala que los teléfonos inteligentes cobrarán mayor importancia para el consumidor durante el proceso de compra, especialmente, durante el momento de compra o en la comparación de precios.
En 2016, el consumidor estadounidense gastó alrededor de 60 mil millones de dólares a través de sus teléfonos inteligentes, esta cifra alcanzó los 93.5 mil millones en 2018, y se prevé que llegue a los 175.4 mil millones de dólares en 2022.
Sin embargo, el gran reto de las marcas de retail que cuentan con aplicaciones móviles es proporcionar una mejor de experiencia de compra a través de estos canales, con la finalidad de generar lealtad, porque el precio de no cumplir las expectativas, el consumidor optará por ir a otra parte.
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Según datos de Google, 73 por ciento de los consumidores digitales cambia de un sitio móvil mal diseñado a otro que facilite sus compras. De manera que uno de los aspectos de la competitividad del sector se encuentra en la experiencia el usuario.
Para una perspectiva s0bre el funcionamiento de las aplicaciones móviles de minoristas, el reporte China’s department stores report 2016-17 de Fung Business Intelligence Centre, muestra la función principal de las aplicaciones móviles de retailers encuestados en China. Según los hallazgos, el 82,4 por ciento de las tiendas departamentales utilizan aplicaciones móviles para la promoción de productos.
Otras funciones relacionadas se muestran a continuación:
- Información y acciones de push marketing – 94.1%
- Promoción de productos – 82.4%
- Programas de lealtad – 76.5%
- Venta del producto – 70.6%
- Proveer servicios de valor agregado – 41.2%
