Todos los días gastamos dinero en pequeñas compras que aparentemente no representan un gasto muy grande. Sin embargo, cuando acumulamos estos pequeños desfalcos nos damos cuenta que se trata de cantidades importantes.
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Para mostrar este fenómeno, la compañía de seguros ING, con sede en Canadá, construyó un automóvil utilizando únicamente vasos desechables que representan el consumo de café de un canadiense promedio.
La idea fue mostrar que si se evita comprar este tipo de artículos y se ahorra ese dinero es posible invertir en mejores cosas, como un auto por ejemplo, así que la mejor disciplina del below the line para esta tarea era nada menos que el Ambient Marketing.
La marca eligió la estación Churchill del metro de Edmonton para erigir la escultura de vasos y poner en marcha una promoción, pues además del mensaje, ING retó a los consumidores a adivinar el número de vasos usados y enviar sus respuestas a través de Twitter o Instagram usando el hashtag #GetWhatYouSaveFor.
La persona que más se acercara al número correcto se ganaría 5 mil dólares. Checa la historia: