Las fiestas patrias representan una ocasión especial para disfrutar de platillos típicos y música mexicana; y dada la ocasión, el uso de adornos es una de las compras más efectuadas.
No obstante, la mayor parte de estos artículos solo tienen en la presentación y colorido lo mexicano, ya que la mayor parte de ellos provienen de China.
José Manuel López Campos, presidente de la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo (Concanaco-Servytur), mencionó que un alto porcentaje de los adornos mexicanos que se comercializan para el 15 y 16 de septiembre son de origen chino.
Trompetas, sarapes, collares, matracas y la propia pirotecnia son algunos de los productos que, sin bien son comprados para la celebración de fiestas patrias, no necesariamente son mexicanos.
Señaló que como sucede en esta y otras fiestas que se celebran a nivel nacional, los comercios y negocios formales se enfrentan a la competencia del mercado informal, que son justo los que adquieren una gran parte de artículos provenientes de China, situación que aseguró los pone en desventaja.
Ante esta situación, el presidente de la Concanaco-Servytur consideró importante reactivar la producción o manufactura de adornos y otros productos para la ocasión dentro del país, a fin de frenar la competencia desleal.
Según estimaciones de esta confederación, para este año se pronostica una una venta de este tipo de artículos de 17,820 millones de pesos, es decir, 4.1 por ciento más que lo obtenido en 2017, aunque la gran parte de esta cantidad derivaría de la compra de productos importados.
Datos del Departamento de Investigación de InformaBTL indican que la banderas, sombreros, collares, matracas y bigotes son de los adornos más comprados.
Para las fiestas patrias de 2018, la confederación afirma que la derrama económica superará los 17,116 millones de pesos registrados el año pasado.
Así mismo señaló que esta festividad representa un periodo importante para la economía nacional, dado que las ventas se reactivan de forma considerable, periodo en el cual algunas categorías como bebidas alcohólicas, tostadas, refrescos, papelería y otras aumentan su nivel de ventas.
