La comida congelada ha sufrido por mucho tiempo de una mala reputación, de que su sabor no es el mismo que el de la comida preparada al instante, además de que pierde sus propiedades nutricionales, sin embargo marcas de este sector han realizado campañas sorprendentes para reivindicar sus productos.
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Tal es el caso de Dr. Oetker, empresa multinacional de alimentación que entre sus productos está la pizza congelada, decidió realizar una activación fuera de serie y para ello invitó a un grupo personas a un restaurant en el que un prestigioso les chef les recibió y les informó que él fue el encargado de preparar los alimentos que iban a degustar.
Acto seguido, las luces del lugar desaparecieron y todo el lugar quedo a obscuras, posteriormente meseros equipados con visión nocturna les sirvieron un plato a cada uno con una pizza de la marca, sin decirles de que se trataba.
Al final, las personas no sólo se llevaron una sorpresa cuando les dijeron que la pizza que se habían comido era congelada, sino que al encender la luces ya no estaban en el restaurant, sino que en una cocina de una casa.
Con esta acción below the line, la marca demostró que con creatividad se puede hacer cambiar a las personas de parecer sobre ciertos alimentos o productos.
