Entre las estrategias BTL que más usan las empresas hoy en día, una activación de marca es de las más recurrentes.
Y es que a través de las activaciones una empresa tiene la oportunidad de impulsar su engagement, al mismo tiempo que genera un acercamiento mayor con el target y fomenta en ellos una empatía y conexión hacia la marca, lo cual deriva en relaciones a largo plazo.
De acuerdo con el Departamento de Investigación de InformaBTL, en 2018 de los 51,879 millones de pesos invertidos en la industria Below The Line en México, 15,563 millones de pesos fueron destinados a la creación y ejecución de activaciones, seguida de los eventos y las acciones de marketing en punto de venta.
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Activación con causa
Regularmente cuando se habla de una activación de marca, lo primero que se piensa es que se trató de una actividad llevada a cabo por una compañía, motivada por diferentes objetivos. No obstante, en esta ocasión la audiencia fue quien se encargó de sorprender a los miembros de un equipo de futbol español.
Durante el medio tiempo del partido entre Real Betis y Atlético de Madrid, aficionados del Betis arrojaron miles de peluches hacia la cancha, la cual estuvo motivada por una convocatoria realizada por la Fundación del Betis, la cual tiene como propósito dar a los niños un momento de alegría el próximo Día de Reyes Magos, según informa el diario El Universal.
Con esta acción los aficionados del Betis participan por segunda ocasión en dicha convocatoria, actividad con la que se espera haber reunido más de 17,000 muñecos de peluche y así superar la cifra del año pasado.
La realización de activaciones en estadios de futbol y en las cuales los aficionados participen de la actividad no es algo nuevo. En noviembre de 2016, durante el encuentro de futbol americano entre los Raiders y Texanos Banorte decidió dar a los asistentes un avión de papel, mismos que fueron arrojados a la cancha, acto que lejos de resultar positivo fue severamente criticado por aficionados, usuarios de redes sociales y medios de comunicación.
Si bien se logró que el nombre del banco fuera recordado, no necesariamente resultó positivo, algo que puede evitarse si se toman en cuenta ciertas previsiones.
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