Iniciar con una pregunta siempre será una buena manera de hablar de interseccionalidad en lo corporativo, porque contribuye a mirar a la empresa de una manera integral, permite ganar en profundidad y reconocer un horizonte de futuro compartido que recoge el contexto en el cual está inmersa la organización, reconociendo que no todas las personas llegan a ellas en las mismas condiciones sociales, culturales e históricas, en tanto le anteceden y más que antecederle, le atraviesan, matrices de opresión.
Hace unos días, publiqué en mi cuenta de LinkedIn que hablar de interseccionalidad parece obvio, pero no lo es, abordarla desde la simpleza nos llevaría a caer en ligerezas que terminan siendo reduccionistas y socavando más opresión sobre los oprimidos.
Vale la pena conversar de interseccionalidad en las organizaciones, en los equipos de marketing, para vernos con otros ojos, para sentirnos en otras pieles y poder comunicar acertadamente. Aunque esta responsabilidad no puede ser relegada única y exclusivamente a estos equipos, se debe integrar a una estrategia organizacional porque incorporar el enfoque interseccional en lo corporativo, ayudaría a mitigar las condiciones sociales y económicas que experimentamos en países como el mío, Colombia.
El hecho de que las personas tomadoras de decisiones en las empresas incorporen este enfoque, reta el sistema porque permite una mirada ecosistémica de las matrices de opresión que atraviesan a millones de personas en el mundo, en clave de raza, género y clase. No basta sólo con tener un enfoque diferencial que permita reconocer las condiciones y el contexto de las personas de la organización; hay que hacer un ejercicio riguroso por transitar en las empresas hacia una mirada de diseño, que vaya más allá de los procesos de selección que se resumen en una cuota, cayendo en el conteo de cuantas personas X o Y se contratan.
Por eso, cuando las empresas trasciendan esta mirada reduccionista se lograrán múltiples cambios sociales, porque se incorporara a las formas de ver y diseñar nuestros contextos y nuestros productos, el despertar de la consciencia que permite este enfoque; evitando las cegueras y el racismo estructural que no nos deja ver, ni tomar decisiones acertadas, quedándonos a oscuras como han estado las grandes marcas de aseo y belleza para el cabello, que han creído que todas las mujeres solo queremos un cabello liso y sedoso.
Así, que hablar de interseccionalidad es una buena manera de preguntarnos ¿qué tan diversa es la organización? ¿qué tan diverso es el equipo de marketing para leer las transformaciones sociales? Esto es un buen arranque, es una buena manera de cambiar el cableado sociocultural que nos atraviesa, pues cómo dicen popularmente no tengo pruebas, pero tampoco dudas.