Ya que los teléfonos móviles son un accesorio indispensable en la actualidad, los sistemas de pago alternativos buscan entrar en las apps de los dispositivos móviles, ahora se volverá el teléfono móvil una terminal de pago.
Cada vez está más cerca la era en que ya no será necesario el pago en efectivo, incluso los pagos con tarjeta de crédito quedarán atrás.
El teléfono móvil se ha vuelto el dispositivo informático con más actividad con alto impacto en la vida de los usuarios. Para muestra, un botón.
Alternativas de pago
Según las encuestas de Statista, en 2016, el 35 por ciento de los consumidores de Estados Unidos encuentra atractivo hacer pagos por medio de teléfonos, pero no con frecuencia. La misma encuesta señala que el 23 por ciento de los encuestados con frecuencia encuentra la posibilidad de hacer pagos en cualquier lugar con esta forma de pago.
Apple Pay es la manera más popular de pago, hasta ahora están disponibles también Android Pay, Google Pay, Chase Pay y también Walmart Pay. La lista de empresas que están optando por esta alternativa de transferencia bancaria está creciendo.
Los smartphones se van convirtiendo, además de las múltiples aplicaciones con que cuentan, en una alternativa real para suplir las tarjetas de crédito. Del mismo modo, el desarrollo de carteras móviles seguras está por rebasar las limitantes de fraude bancario móvil.
La era digital facilita que los consumidores realicen más compras en línea y, por cuenta de las empresas que desarrollan plataformas de forma de pago alternativa desde el móvil, se ha visto beneficiada.
PayPal en el último año ha reportado un 55 por ciento de crecimiento interanual ya que su volumen de pago móvil ascendió a 102 mil millones de dólares respecto a los 66 mil millones de dólares del periodo fiscal anterior.
En el mismo gremio, Mobile Point-of-Sale (mPOS), Square y ShopKeep, no se quedan atrás y están disponibles para pagos desde tabletas y teléfonos inteligentes. Las habilidades que muestran para realizar transacciones con nuevas aplicaciones puede llegar a la gestión de inventario de pequeñas empresas, consumos e incluso nóminas.
Ahora sólo queda ver cómo va a ser el juego entre los grandes proveedores de teléfonos inteligentes.