En todo trabajo habrá funciones que cada uno de nosotros debamos desempeñar de forma individual, pero incluso hasta ese tipo de actividades, en algún momento, puede que nos haga falta solicitar ayuda de nuestros compañeros de trabajo.
Trabajar en equipo es una de las formas más efectivas para obtener exitosos resultados conjuntos, no sólo enfocados hacia el trabajo en sí, sino también por las relaciones laborales y de apoyo que se generan entre los miembros.
Pero el fortalecimiento de relaciones de trabajo y la disminución del tiempo para terminar un proyecto dentro de la empresa no son los únicos beneficios que se pueden obtener de una colaboración laboral.
Estimula la creatividad
Generar buenas ideas es el resultado de muchas ideas que versan en un sólo tema o propósito. La famosa frase de “dos o más cabezas piensan más que una” deja de ser un cliché cuando es aplicada al trabajo en equipo y los resultados obtenidos incluso superan las expectativas que se tienen el iniciar un proyecto.
El trabajo en equipo puede sacar lo mejor de cada colaborador, tanto de forma personal como habilidades profesionales que no habíamos identificado. El trabajo en grupo puede dar lugar a muy buenas ideas provenientes de cada integrante y de sus distintos enfoques, a través de una lluvia de ideas, una herramienta muy efectiva, y más aún cuando se realiza en grupo.
Suma de talentos
El trabajo en equipo no implica que todos los integrantes colaboren con todas las tareas, sino que cada uno asuma sus funciones, desempeñe el rol que le toca y así contribuya directamente con los buenos resultados de todo el equipo. Esto da lugar a una suma de talentos, habilidades y puntos de vista distintos, lo que garantiza un mejor trabajo a que si se realizara de manera individual.
Fomenta la tolerancia
Al trabajar con más personas cada uno de nosotros nos hacemos más tolerantes al interactuar con colaboradores con formaciones profesionales distintas, con formas de pensar y trabajar diferentes y con ideas que pueden discrepar de las nuestras. Lo anterior hará que nuestro nivel de tolerancia sea mayor no sólo por el beneficio del equipo, sino también por mantener relaciones laborales amenas y por la oportunidad que esto nos da para mirar una situación o problema desde distintos ángulos.
Ayuda a la motivación entre los integrantes del equipo
Cuando en un equipo alguno de los colaboradores llega a un punto en el que cree ya no poder dar más o se sienta desanimado por agentes laborales o personales, el apoyo y empatía de sus compañeros hará que la motivación crezca e influya positivamente para que ese colaborador recobre la confianza en sí mismo, y por ende, retome su rol dentro del equipo, trabaje motivado y esto se vea reflejado en su desempeño laboral, lo cual sin duda impactará en todo el grupo.
Disminuye la presión y carga de trabajo
Trabajar de manera grupal también ayuda a disminuir la presión que cada miembro del equipo tiene, ya que al delegar responsabilidades y tareas, la presión por cumplir en determinado tiempo puede disminuir, al mismo tiempo que la carga de trabajo se equilibra.
Si esto no sucede, el nivel de estrés de cada miembro del equipo es muy probable que aumente, lo que podría derivar en malestares físicos ante una gran carga laboral, tensión, enojo y otras emociones que, lejos de beneficiar, perjudican el trabajo grupal.
Eleva el compromiso de los colaboradores
Participar en el análisis y toma de decisiones compromete a cada integrante con las metas del equipo y los objetivos organizacionales. El hecho de ver que cada uno de los colaboradores cumple con sus funciones y pone su granito de arena en beneficio del grupo, hará que aquellos miembros que aún no se involucran del todo terminen comprometiéndose consigo mismos y con el trabajo conjunto.
Mejora la comunicación
Compartir ideas y puntos de vista con otros, en un entorno que estimula la comunicación abierta y positiva, contribuye a mejorar el funcionamiento, tanto de los integrantes del equipo como de la propia empresa.
Entablar un contacto directo con el resto de los colaboradores, tener un intercambio de ideas, exponer nuestros puntos de vista y motivar la retroalimentación hará que la comunicación al interior del equipo contribuya a un mejor funcionamiento del mismo grupo.