Ser una lovemark no es cosa de juego, no se trata de un reconocimiento que sólo signifique mayor estatus para las marcas que así sean consideradas. En realidad, el término lovemark engloba todo un cúmulo de resultados que se traducen en una marca fuerte, es decir, en una empresa exitosa.
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A continuación te presentamos 5 errores que muchas empresas cometen y por los cuales difícilmente se convertirán en una “marca amada”, por lo menos no mientras los sigan replicando y no tomen acciones correctivas.
1) Ofertar productos de mala calidad: Un error común entre empresarios radica en menospreciar al consumidor y creer que este seguirá comprando un producto o servicio, aún cuando sea de mala calidad si se ejecuta una gran acción de mercadotecnia en torno a él. Para ser una lovemark se debe pensar a largo plazo y no sólo en el futuro inmediato del negocio, es decir, un producto de mala calidad en el largo plazo sencillamente está destinado al fracaso.
2) Brindar mal servicio al cliente: Si bien es cierto que el producto de calidad es indispensable, la atención al cliente es fundamental para arroparlo en su camino al éxito. La atención debe procurarse antes de que el consumidor adquiera el producto o servicio, durante la compra se debe generar una experiencia memorable y una buena atención es parte de esa experiencia, y tras la compra se debe dar seguimiento para saber si el cliente está satisfecho y si no lo está determinar las acciones que cambien su perspectiva.
3) No implementar medidas amigables con el medio ambiente: Cada día son más los consumidores que toman conciencia de la importancia de preservar el medio ambiente y que se inclinan por los productos, bienes y servicios cuyos procesos de producción son amigables con el medio ambiente. Ellos prefieren a las marcas que también destinan recursos para el apoyo de causas asociadas a mitigar la huella ambiental. Además, esta responsabilidad social empresarial debe comunicarse para que el consumidor tenga un elemento más al momento de tomar su decisión de compra.
4) No retener al personal talentoso: Porque la construcción de imagen de marca no sólo se da hacia afuera de la empresa, sino también hacia su interior, es importante contar con un modelo de negocio que valore, fomente y motive a los trabajadores. En ese proceso, analistas aseguran que es indispensable disminuir la rotación constante del personal y fomentar la retención de aquellos trabajadores que deriven más y mejores resultados para la empresa, ya que serán ellos los principales impulsores de los buenos resultados y algunos de los embajadores de marca más valiosos.
5) Seleccionar mal al personal responsable de puestos estratégicos: Se puede ser una empresa con personal altamente capacitado en puestos operativos e incluso una marca que busque retener a ese personal; sin embargo, cuando este personal no está bien dirigido, los resultados sencillamente no serán los mejores. Dicha situación se da más en el sector público, pero la iniciativa privada no se salva de la asignación de puestos estratégicos bajo prácticas del llamado ‘nepotismo’ o simplemente por empatía personal, aún cuando el candidato seleccionado no cuente con el perfil adecuado.
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