En años anteriores era más común que un empleado permaneciera en un trabajo por mucho tiempo, tal vez por comodidad, seguridad económica o porque simplemente así lo deseaba.
Ahora, las prioridades de las nuevas generaciones de talento humano han cambiado radicalmente; hoy en día es difícil que un colaborador se conforme con tener un sueldo seguro y no tener tantas responsabilidades, además de que siempre está buscando prepararse, mejorar sus capacidades, crecer y subir peldaños en su carrera profesional.
Si lo anterior no es posible, la estancia de tu colaborador seguro no será por mucho tiempo, lo que puede ocasionar que pierdas gente valiosa y capaz que difícilmente tendrás de vuelta en tu empresa.
A continuación te presentamos 8 razones por las cuales tu talento humano puede despedirse para no regresar.
Sobrecarga de trabajo
Es cierto que las nuevas generaciones, sobre todo los millennials, son colaboradores que siempre buscan estar ocupados, pero eso no quiere decir que debas saturarlos de trabajo, y pero aun, delegarles funciones que no les corresponden y que otros deberían desempeñar.
Pueden amar lo que hacen, pero si abusas de su pasión por el trabajo, en el momento menos esperado renunciarán.
No agradecer su esfuerzo
No se trata de estar todo el tiempo adulando a la gente, sólo es cuestión de dar las gracias por el buen trabajo realizado, y alentar y tus colaboradores cuando han tenido un mal día o las cosas salieron mal, en lugar de señalar e insultar.
Anteponer los resultados sobre la relación laboral
Cuando un jefe se preocupa sólo por obtener buenos resultados, sin tomar en cuenta el trabajo que hay detrás, hará que tus colaboradores se sientan reducidos a simples cifras, lo cual puede afectar su autoestima, y se corre el riesgo de perder a un elemento valioso.
Prometer cosas que jamás vas a cumplir
No ser honesto consigo mismo ni con los miembros de tu equipo es un gran error. Si prometes cosas que sabes de antemano que no vas a cumplir, además de generarte desconfianza por parte de tus colaboradores, también será motivo para que comiences a ver rotación y fuga de talento.
No das salario emocional
Sin duda uno de los salarios más importantes de las nuevas generaciones de colaboradores. Capacitarlos, ser flexibles con los horarios de trabajo, permitir que después del trabajo tengan tiempo libre, tener actividades recreativas, la oportunidad de crecer dentro de la empresa son sólo algunas de las formas en que puedes brindarles un sueldo de este tipo y les das razones de peso para no irse.
Pero si no existe esto, la renuncia no tardará mucho tiempo en hacerse presente.
Limitas el crecimiento profesional
Algo que hará que tus colaboradores no duden en mirar hacia otros horizontes es obstaculizar su crecimiento profesional dentro de la empresa. Cortar las alas de tus talento humano sólo te traerá rotación constante y falta de compromiso por parte de tus empleados.
Promoción de las personas incorrectas
Ya sea porque te llevas muy bien con ese colaborador, porque siempre está de acuerdo contigo y nunca te dice que no o porque es un recomendado de alguien, promover a estas personas, sabiendo que hay gente mucho más capaz para ser promovida, hará que quien en verdad merecía esa oportunidad se vaya, ya que sentirá que todo el esfuerzo realizado pasa a segundo plano.
No dan retos a sus colaboradores
Dar actividades rutinarias, que se terminen en cuestión de minutos o delegar funciones que no se relacionan en nada con el puesto que se tiene, es también otro de los grandes motivos por los que nuevas generaciones de colaboradores deciden dar un giro a su carrera profesional y buscar mejores opciones.
Lo que hoy desea un miembro de tu equipo es que le des la oportunidad de demostrar de lo que es capaz de hacer, y por ello buscará retos nuevos que afrontar y aprender en el proceso.