Por: Arturo González Salas
Twitter: @Artglez
Estoy por graduarme en la maestría en Marketing Turístico, fue ahí donde encontré extraordinarios amigos, pude ahondar en temas que me apasionan y conocer a expertos. Dentro de los expertos, hubo algunos que lograron entrar en mi top de favoritos, por ejemplo Ruy Martínez de Sabre, Ramón Godinez del Periódico El Informador y la Universidad de Guadalajara, Víctor Sánchez de Monkey and Banana y Martín Reyes de Cítrico.
La introducción además de sonar a presunción es el preámbulo para tocar el tema de la educación y el marketing, espero que al terminar de leerme sienta que las primeras líneas contienen sustancia.
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Las instituciones educativas, públicas y privadas, desarrollan estrategias para posicionarse en el mercado, suelen caer en la monotonía de los medios tradicionales y sus avances en marketing con frecuencia son perfiles en redes sociales, aunque estos no sean alimentados periódicamente.
La mercadotecnia en el área de la enseñanza es un tema extenso, más por la insuficiencia en planes que por la brillantes de los que existen. Sin embargo, todos los días convivimos con BTL que emana empíricamente de maestros, alumnos y directivos. Le enumero algunos ejemplos:
1. Uso de uniforme: Es una forma de extender la imagen de la institución con publicidad ambulante, además de ser un mecanismo para conseguir la diferenciación.
2. Señalización: Llegar a un lugar en nuestro país es una misión imposible, la tarea se complica por la ausencia o la saturación de letreros y señales de transito. Una escuela que nos dice como llegar, merece que la visitemos.
3. Conferencias y eventos: Sin lugar a dudas, representan un instrumento para publicitar la institución, lo importante es establecer desde el inicio los beneficios y sus costos.
4. Intercambios y viajes de prácticas: Las alianzas académicas resultan un mensaje de estabilidad institucional, un alumno que realiza un viaje de intercambio funge como representante y a la vez como generador de contenidos en forma de publicity.
5. Instalaciones: Es evidente que los espacios donde se imparte educación, son vitales para que los resultados sean los esperados, sin embargo, unas buenas instalaciones pueden trascender y convertirse en un icono de la ciudad o una referencia colectiva.
6. Satisfacción: Un alumno contento es un vocero que paga. Esta muy de moda medir la satisfacción de los servicios que prestan las instituciones académicas, medir es un paso muy inicial, lo importante es que planeen mejoras a raíz de las radiografías que se han tomado.
7. Desempeño de los egresados: A la par de la satisfacción se utiliza el ejemplo de los alumnos que han concluido sus estudios, ellos son un estandarte de los atributos que se ofertan.
8. Profesores: Hacen marketing al impartir clases que amamos u odiamos, en donde nos dormimos o abrimos los ojos con intensidad.
Finalicé con los profesores porque me resulta increíble lo que un ser humano puede hacer. Estudio los fines de semana, con horarios de muerte. En la recta final, me di cuenta lo bueno que es tener profesores que nos devuelvan la confianza, logren transmitir el conocimiento y decidan convertirse en amigos (Toronjo: esto es por ti).
Con especial afecto a los profesores que hacen BTL a sabiendas o en pleno desconocimiento, porque es en el ejemplo y la inspiración, donde converge la enseñanza y la mercadotecnia.
