Por: Arturo González Salas
Twitter: @Artglez
Hace varios años llegó a mis manos un libro de Stephen R. Covey, era un bestseller internacional, lo tenía que leer y llevar un semestre en la materia de liderazgo, me rehusaba a creer que se tuviera que cursar dicha materia en la universidad, con el tiempo comprendí que se debe impartir debido a que en pocas familias se fomenta el desarrollo de las habilidades del líder.
Del libro aquel aprendí mucho, existen documentos que consiguen modificar nuestras perspectivas, es por ello que he adaptado sus 7 preceptos para que los profesionales y neófitos del BTL puedan aplicarlos.
Covey de manera magistral nos adentra en temas como la ética, la forma en la que vemos las situaciones y las respuestas que tenemos ante ellas. La primera acción para un BTL efectivo es reconocer que se trabaja con paradigmas, también debemos entender que nuestro trabajo puede modificar la conducta del consumidor y por lo tanto la del mercado.
7 hábitos para practicar en lo personal y por supuesto en su labor de marketing:
1.- Sea proactivo: el BTL por naturaleza lo es, su esencia se basa en buscar la solución a pesar de presupuestos, tiempos y medios. Ser proactivos es una actitud ante la vida, las herramientas de marketing deben ser la respuesta a los problemas de las empresa y no un problema más.
2.-Empiece con un fin en mente: cuando hacemos campañas BTL o ATL debemos empezar con un objetivo, la metáfora del turista que busca un museo con el mapa de otra ciudad, nos permite comprender que en ocasiones nuestro trabajo para alguna marca ha sido brillante, otra marca o empresa tendrá su propia lista de requerimientos.
3.- Establezca primero lo primero: una clave de la dirección de proyectos es priorizar, si eligió el BTL porque parece una herramienta desenfadada y hippie, le comento que la mercadotecnia es una actividad administrativa, por ende se basa en procesos, mismos que deben jerarquizarse para que el objetivo se obtenga.
4.- Pensar en ganar-ganar: este hábito nos permite comprender que la competencia no es el factor de amenaza y debilidad que se coloca en el FODA de miles de empresas. Aplicar el concepto ganar-ganar es una tarea compleja porque hemos sido educados bajo la regla “para ganar”¦ alguien tiene que perder”, algunas empresas hacen BTL por medio de alianzas, le brindan a sus clientes bonus inesperados, cuentan con programas de responsabilidad social.
5.- Procure primero comprender, y después ser comprendido: es evidente que cuando una firma contrata los servicios de BTL es porque requiere se comprenda sus situación, la forma de demostrar empatía es escuchando al cliente para luego soltar la información que él mismo solicite.
6.- Sinergia: el hábito de interconectarnos para beneficios en común se da cuando hemos practicado los hábitos anteriores, usted sabrá que ha conseguido desarrollar este concepto, cuando las actividades cliente-agencia fluyen y por lo tanto generan una relación confortable para desarrollar un BTL coordinado.
7.- Afile la sierra: este último punto nos invita a estar preparados para renovarnos. Arjona y Maná no son de mi agrado debido a que escuchar cualquiera de sus canciones es la misma melodía con otra letra, en el BTL podemos caer en la monotonía al no estar actuales en tendencias globales.
Dicen que el hábito no hace al monje pero los 7 hábitos anteriores si hacen del mercadólogo un asesor con mayores capacidades, lo aleja de la comparación de aquellos que van por la vida realizado las cosas como se van presentado, diciendo ‘se hace lo que se puede’ y culpando a todos del fracaso sin reflexionar sobre las responsabilidades que adquirimos al aceptar trabajar para una marca.
Para que lo anterior funcione se debe aplicar, se que suena bastante lógico, prefiero advertir a tener tweets con reclamos.
El BTL rompe el esquema de lo lógico con el objetivo de sorprender, la única forma de lograrlo es transitar fluidamente entre lo común y lo extraordinario.
Mi consejo es: ¡Practique, practique y practique!
