El acomodo de cada departamento, categoría y ubicación exacta de anaqueles en retailers responde a un elemento fundamental: planograma.
En términos generales se trata de una representación a escala real de los micro lay outs (espacios de exhibición asignados a las distintas categorías al interior de una tienda de retail), que indica las posiciones y caras de exhibición de los distintos productos que conforman una categoría, al interior de sus respectivos anaqueles.
Un planograma, además de lo anterior, también debe facilitar la búsqueda de los productos por parte de los clientes, y proporcionar mejores indicadores financieros mediante el aumento y la composición de la venta de autoservicio.
Entre las ventajas que un planograma le da a un retailer destacan los siguientes:
- Satisfacción plena del shopper.
- Mejora sus estrategias comerciales y de negocio.
- Optimiza la logística.
- Incremento en las ventas.
Como se puede percibir, este elemento de todo minorista es un pilar para la efectiva localización de cada categoría, que sin duda tendrá un impacto inmediato y directo en sus ventas e ingresos.
Sin embargo es preciso que al momento de diseñarlo, se tomen en cuenta los siguientes 5 puntos clave:
Objetivos o propósito
No es otra cosa que definir qué se quiere conseguir con el diseño de un planograma y, en base a ello, el impacto que se desea conseguir en el shopper. Por ejemplo, definir si se quiere disminuir el stock en bodega de temporadas pasadas, impulsar las ventas de artículos que estén próximos a caducar, por mencionar algunos objetivos.
Se debe determinar lo que se quiere vender y la mejor manera hacerlo.
Conocer el journey del shopper
Es fundamental que cada retailer tenga bien ubicado el recorrido habitual que hace el cliente al interior de la tienda, es decir, que sepa cómo se desplaza, qué categoría visita primero, cuáles son sus patrones de recorrido, entre otros elementos que le ayuden a mejorar el diseño del planograma, en su beneficio.
Dimensionar correctamente el espacio de cada exhibición
Se debe contar con las medidas exactas, tanto del espacio que ocupará la exhibición como de los mismos productos, para entonces tener estantes o anaqueles adecuados que permitan un acomodo correcto, y favorezcan la presentación de la mercancía.
Contar con las dimensiones precisas hace que el planograma se convierta en una herramienta de administración de espacios funcional, pero sobre todo, determina con exactitud el inventario de la categoría, permitiéndonos análisis precisos y escenarios reales.
Ayuda a generar una estrategia ideal de acomodo de stock
Las decisiones con respecto al acomodo de productos, deben atender variables como el tipo de decisiones de compra en cada categoría, rentabilidad, objetivo de días de inventario y experiencia de compra que le permita al shopper acceder a sus productos de forma sencilla.
Comunicación y ejecución
El planograma debe estar en un formato de fácil acceso para su ejecución. Se puede hacer uso de impresiones y distribuirlos en todas las tiendas, sin olvidar la inclusión de un representación gráfica clara de la estrategia de acomodo, descripción de productos, códigos de barras, entre otros elementos.
Será de gran ayuda contar con un reporte de las variables de negocio básicas para cada categoría, tales como un reporte de desempeño en ventas, reporte comparativo del espacio ocupado por marca entre las ventas por pieza de producto, así como otra información.
Hacer un planograma demanda tiempo, análisis y objetivos claros; por ello es preciso contemplar los elementos necesarios en función de los beneficios que se desean obtener.