El packaging de un producto es fundamental en la construcción de la marca durante su promoción, pero también en el momento de compra y a lo largo de la experiencia de consumo. De acuerdo con el Departamento de Investigación de InformaBTL, el 69% de los consumidores está dispuesto a comprar un producto si su empaque es lo suficientemente atractivo.
En tal sentido, el empaque de un producto puede entenderse como una tarjeta de presentación. Pero además, es un elemento que incide en la compra cuando un shopper se encuentra frente al anaquel, el sitio en donde se toman el 80% de las decisiones.
Es por ello que es relevante saber cuáles son las características que debe tener un packaging. Según Pixartprinting, lo que se debe considerar es lo siguiente:
1. Una personalización más marcada: Así las compras tendrán menos el valor de objetos y más el de servicios para mejorar la vida del consumidor.
2. No sólo productos, sino experiencias: El embalaje adquirirá nuevas funciones, podrá dársele otro uso una vez en casa y adaptarlo a nuestro estilo de vida personal.
3. Formas en movimiento: Innovaciones en los materiales y en las tecnologías han llevado al consumidor a pensar en el embalaje como algo dinámico. No más cajas sencillas, sino formas y conceptos nuevos de estructuras diversas.
4. Potenciar la innovación: Vender no basta, es necesario para las marcas llevar adelante un programa político, moral, social y ético. El embalaje es un medio para mensajes más importantes que la simple compra.
5. Compartir historias: La narración de historias con efecto es la que hace que la marca se recuerde, con una imagen visual distintiva y una narración escrita eficaz.
