Las Pequeñas y Medianas Empresas (PyMES) apuestan a convertirse en lovemarks, al menos en un ámbito a su escala. Se trata de la mayor fuerza económica del país con 4 millones 15 mil unidades que aportan el 52 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI).
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Sin embargo, parece ser que sólo las grandes empresas pueden aspirar al concepto de marcas amadas, a pesar del enorme potencial de las PyMES.
Por ello, dejamos algunos elementos clave para que una pequeña empresa se convierta en una lovemark.
1. Responsabilidad social
“No solo se trata de hacer dinero, sino de construir un mundo mejor”, señala Raj Sisodia, fundador de Conscious Capitalism, firma asesora de marcas. Las PyMES cuentan con la ventaja de estar incorporadas dentro de la comunidad, por lo que pueden detectar las necesidades y carencias inmediatas que pueden atacar desde su posición.
2. Embajadores de marca
De acuerdo con datos del INEGI, el 72 por ciento de los puestos formales en el país depende de la economía de las PyMES. La mayoría de los empleados forma parte integral del mecanismo de la empresa, por lo que buenas condiciones laborales y un trato justo harán de los empleados los mejores embajadores de la marca.
3. Involucrar a las partes
Trabajadores, proveedores y consumidores pueden involucrarse en la construcción de una marca fuerte: la economía a menor escala ayuda al trato directo, la atención personalizada, y el trabajo en la propia comunidad.
4. Redes Sociales
Son la herramienta perfecta para las PyMES, mediante aplicaciones o cuentas en distintas plataformas puede llegarse a otros clientes y promover el servicio y la marca. Además sin costo alguno ni un peso de pauta.
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