Desde siempre me ha apasionado la política, antes de conocer el marketing como tal, estaba enamorado de ella, luego entró la mercadotecnia en una de esas conversaciones de adultos y desde entonces se convirtió en la dueña y señora de toda mi vida.
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Fue así como la política ocupa el cargo de amante, les confieso que se llevan tan bien que suelen trabajar en conjunto para mi, además, así es debe ser, el poder somete, aunque en ocasiones nos mantiene sometidos, como en esta ocasión a mi, en una especie de codependencia entre que es trabajo y es placer.
Todo el choro anterior es solamente para demostrar mi afiliación superior por las polaca, pero más allá, para describir que en ella donde habitan conceptos que suelen ser usados de manera convencional, pero al mismo tiempo arbitraria, pues se adolece de sentido o sustento.
En el caso de la derecha o la izquierda, el centro o pa´dentro, es una forma de hacer una clasificación en las manifestaciones de partidos, gobiernos y candidatos. Se supone que la ideología es la visión empresarial del estado, así que cada partido presenta su visión bajo los principios que le definen.
Algo muy similar sucede en la vida publicitaria, desde que entré a InformaBTL dedico mi tiempo a la nomenclatura publicitaria, qué si es ATL, que si es BTL, que si es TTL y OTL. Total que uno termina por convertirse en OGT.
Lo bueno de las clasificaciones al convivir engendran hijos, unos legítimos otros por debajo de la mesa, como diría Luis Miguel. Lo que es destacarse es la naturaleza que tenemos para darle nombre y características a los nuevos términos, un paso adelante, un paso atrás y estamos ante una innovación académico-práctica.
Si empleáramos términos políticos para describir los hermanitos del BTL, tendríamos algo así:
- El ATL es el mayor de todos, es el líder de bancada, es la derecha, su discurso es viejo pero se le ve que cuenta con muchos adeptos. Sus simpatizantes suelen decir “más vale malo por conocido, que bueno por conocer”.
- El BTL es el lado izquierdoso de la publicidad, también es líder de bancada en el congreso, pero se siente frente al ATL para destacar sus fallas, su discurso es sencillo, emotivo y muy personalizado, cada vez cuenta con más afiliados. Sus adeptos cometan “ya me cansé, hace falta un cambio”.
- El TTL, representa lo neutro, ellos están con dios y con el diablo, no son lideres de bancada, más bien son lo que el cliente diga que quiere. Su estrategia es jugar todas las canastas sin importar cuantos huevos se rompan. Sus simpatizantes les ven como el “milusos”.
- El OTL es la parte new age de la polaca, en publicidad es el niño fresa y actual, si fuera un partido es aquel que esta activo en redes sociales e internet, pero que nunca ha visitado a sus votantes en persona. Sus simpatizantes le defienden o crucifican “on line” pues el lavado de cerebro se presenta por medio del uso de dispositivos, mismos que portan a todas horas del día.
Como en la política, hay gente para todo, igualmente en la publicidad, lo interesante antes de votar es hacerlo a conciencia, es hacerlo por aquellas siglas que cumplan con los objetivos de sus planes publicitarios, recuerde que en publicidad no existen restricciones, usted puede votar por uno, por dos, o por todos.
¡Sufragio efectivo, si a la reelección publicitaria!
