Más allá de la función práctica, durante los últimos años, el packaging se ha convertido en un espacio muy relevante para las marcas, porque gracias a este elemento se llevan a cabo estrategias de comunicación dirigidas al consumidor final —es por eso que algunos lo conocen como un “vendedor silencioso”— y así, las marcas pueden desarrollar la construcción de su marca. Obteniendo así, más relevancia tanto para los consumidores, el mercado y el punto de venta.
Llamar la atención en el PDV
Se ha estimado que el comprador promedio de supermercado sólo es capaz de escudriñar de arriba abajo un poco más de un metro de estantería en un segundo. Desde un anaquel saturado, el empaque tiene que atrapar el ojo del comprador y darle a conocer instantáneamente cuál es su contenido, sin la menor ambigüedad.
Por otro lado, es imposible generalizar sobre las causas que hacen de un artículo llamativo; sin embargo, es importante comprender la situación en la que el artículo va a venderse.
Debe estar diseñado para el momento de la verdad. la exhibición
El empaque debe revelar los rasgos atractivos del contenido. Esto puede lograrse por muchos métodos, como el uso de ventajas claras, recortes, o de una burbuja rígida en el paquete.
De hecho, en numerosas situaciones de menudeo, el tamaño y forma del empaque es importante para permitir que los productos encajen en la estantería normativa de exhibición y dejar al minorista almacenar una densa concentración de artículos.
Por ejemplo, algunos productos suelen colgarse en barras metálicas o percheros; no obstante, el diseño del empaque tiene que permitirlo. De otra manera, el packaging debe proteger el contenido de la manipulación descuidada del shopper.
Se debe mostrar la misión del negocio
Asimismo, el packaging debe reforzar la imagen de la empresa y, según su estrategia, también encajar con cualquier otro artículo que la compañía produzca o bien diferenciar un producto de modo que resulte atractivo en su mercado objetivo.
Tener un precio competitivo
Sin duda, el packaging puede representar una gran proporción del costo unitario de un artículo. Por tanto, más vale asegurarse de investigar a fondo las opciones y sus costos. De tal manera que se debe pensar en un empaque algo original o mejor que otros productos de la competencia.