El marketing político es aquel que ayuda posicionar a un candidato en la mente de los electores (shoppers) y lo puede lograr a través de acciones below the line, que pueden utilizar la personalidad, físico o algun otro atributo de la persona que está compitiendo por un puesto de elección popular.
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Para ello, las agencias deben crear campañas que le lleguen de una manera emocional a las personas para que así apelen al voto de ellos, ya sea utilizando el amor o incluso el odio para convencerlos de que ellos son la mejor opción para gobernar.
De acuerdo con Arturo González, director general de Asero&González, hay 4 cuadrantes que el marketing político utiliza para convencer a los ciudadanos:
Amor
Miedo
Esperanza
Odio
Un claro ejemplo de cómo los políticos llegan a utilizar este cuadrante, es la campaña que ha venido desarrollando Andrés Manuel López Obrador, que en sus spots recurre al odio hacia un grupo de políticos (PRI y PAN), infunde el miedo argumentando que con los gobernantes del tricolor se puede llegar a perder derechos lo que da paso a la esperanza de que con su partido el cambio será verdadero y por último asegura que el ama al país y por ello quiere ser presidente para cambiar las cosas.