Una de las mayores preocupaciones de los empresarios a nivel mundial la podemos observar, claramente, en la siguiente pregunta: ¿Cómo puedo conseguir clientes más rápido? La respuesta rápida sería: promociones. Mientras que la respuesta más elaborada sería: Has uso de las promociones de ventas para añadir más valor a tu producto o servicio.
Y lo que sucede es que las promociones de ventas están diseñadas para conseguir resultados casi de inmediato. Básicamente porque las promociones aportar un valor tangible a los bienes o servicios, además, contribuyen mucho a la rentabilidad de un negocio.
Sin embargo, ¿sabías que puedes hacer uso de las promociones para atraer a los clientes de la competencia? Así es. A continuación, te explicamos qué tipos de clientes puedes conseguir lanzando una estrategia de marketing promocional al mercado.
Consumidores a los que gusta el cambio
Estos consumidores son fáciles de atraer, pero también están dispuestos a marcharse cuando son atraídos por las promociones de la competencia.
Consumidores leales a las marcas de la competencia
Si están satisfechos con su producto habitual es difícil que se sientan atraídos por la promoción de otra marca, pero, aún cuando lo hagan, volverán a su marca preferida en cuanto termine el incentivo promocional.
Consumidores leales a otras marcas, pero insatisfechos con ellas
A pesar de su descuento, siguen comprando por rutina su marca habitual. Si son atraídos por el incentivo promocional y el producto les satisface, es frecuente que cambien definitivamente y entreguen su lealtad a la marca promocionada.
Como ves, una rebaja temporal del precio de venta provoca que la demanda de un bien o servicio aumente, obteniendo un incremento de las ventas. Recuerda: las promociones consisten en cualquier otro incentivo añadido a la oferta normal en tu negocio. Por esa razón, el incentivo promocional tiene que ser distinto a la oferta que están acostumbrados tus clientes y prospectos.