La llegada de nuevas marcas a nuestro país ha develado la importancia de contar con espacios comerciales para la venta especializada de artículos de diversas categorías.
De acuerdo con un estudio de Lizan Retail Advisors, los centros comerciales en Latinoamérica han crecido 5 por ciento anualmente, lo que equivale a 10 mil metros cuadrados que se pueden alquilar.
México encabeza la lista de países que más centros comerciales tiene, posee 650 construcciones, y Brasil le sigue con 600 complejos dedicados a la venta al por menor.
No obstante, el estudio señala que a pesar de que en México se desarrollan alrededor de 40 proyectos al año, este ritmo no es suficiente para satisfacer la demanda de espacio de las marcas minoristas y la demanda por parte de los consumidores.
Datos de Tiendeo indican que los puntos de venta físicos siguen siendo los preferidos de los mexicanos para realizar compras. Sin embargo, las compras en línea siguen creciendo.
Por otro lado, un estudio de mercado siempre es fundamental para poder conocer si una idea será viable. En el caso de los Centros Comerciales también existen ciertos métodos para obtener esta información. De acuerdo con Clau Consultors, existen algunos tipos de investigación, que a continuación te presentamos:
Estudio de perfil y satisfacción de la clientela
El estudio de clientela se basa fundamentalmente en una encuesta en el centro comercial con el fin de obtener información sobre el perfil de los visitantes, sus hábitos de visita, la valoración de distintos aspectos del centro comercial, impacto y valoración de campañas de marketing y eventos, etc.
Estudio de procedencia de la clientela
El objetivo básico de este tipo de estudio es conocer con la máxima precisión la procedencia de la clientela del centro comercial de modo que se pueda establecer cartográficamente el área de influencia (primaria, secundaria, terciaria) y obtener el perfil básico del visitante.
Mystery shopper o cliente misterioso
El cliente misterioso audita todo el proceso que se desarrolla durante la visita al establecimiento observando y valorando tanto los aspectos físicos como de servicio y cumplimentando un informe exhaustivo inmediatamente después de la visita.
El modelo permite cuantificar el grado de calidad del servicio y detectar las áreas susceptibles de mejora u optimización, tanto para cada una de las tiendas / establecimientos auditados como para los servicios comunes del centro.