Además de un layout y un plan de Trade Marketing al interior de un punto de venta, desarrollar una estrategia de Shopper Marketing apoyada en elementos clave de exhibición es de vital importancia.
Y esta relevancia radica no sólo en el packaging o material POP que cada anaquel muestre, sino también en el acomodo y distribución estratégicos de cada producto y marcas presenten en los distintos pasillos de un punto de venta.
Ante el dinamismo de los consumidores, sus nuevos hábitos de compra, necesidades y gustos, los retailers, junto con fabricantes, han tenido que innovar y replantear sus estrategias de shopper marketing para mantenerse en el gusto del target y elevar su consumo. Y para lograr ambos objetivos, los retailers pueden apoyarse en las siguientes tendencias de exhibición de productos en punto de venta para este año.
Iluminación estratégica
La exhibición de productos con colores obscuros y gráficos puede ser un reto para lograr una ejecución perfecta en punto de venta, pero a la vez una estrategia de visual merchandising innovadora y de gran impacto que contempla el uso correcto de iluminación para resaltar color y productos es bien recibida por el target.
Displays interactivos
El shopper actual es un nativo digital y está en busca de obtener una experiencia de compra por medio del uso de tecnologías que le permitan estar en contacto con sus brands. En este sentido la utilización de displays o pantallas interactivas en punto de venta será de gran ayuda y relevancia para el consumidor que desea estar en contacto con sus marcas y productos.
Con el uso de esta tecnología, tanto el retailer como el fabricante tienen la oportunidad de informar al cliente sobre datos adicionales de sus productos, ofrecer promociones, sugerir e incentivar la compra de otros artículos que complementen los que tiene pensado adquirir y elevar su gasto, entre otro tipo de información de interés para el target.
Activa los sentidos: marketing sensorial
Poner en juego los 5 sentidos del consumidor en punto de venta harán que tu exhibición sea mucho más atractiva para el cliente y propicie en él una serie de sensaciones que le brinden una experiencia, lo que favorecerá su decisión final de compra. Esto lo puedes hacer con elementos de ambientación como música, fotografías y aromas que evoquen la atmósfera deseada.