Hoy en día para las compañías involucradas en el comercio electrónico supone un reto transportar los productos a cualquier destino, sobre todo porque es un elemento clave para su competencia en el mercado.
El desempeño de la logística de un e-tailer se ve influenciado por aspectos como el clima, reglamentos internos, la disponibilidad de vías de comunicación, los costos de los canales de distribución, entre otros factores.
De acuerdo con la Asociación Mexicana de Venta Online (AMVO), las principales operaciones de un almacén son la entrada de productos, almacenaje, surtido y expedición. Según la AMVO, algunas de las modalidades logísticas son la venta de productos a clientes finales a través de distribuidores, que se conoce como Dropshipping.
Asimismo, el almacenamiento subcontratado, esto para evitar inversiones adicionales, y utilizar los servicios logísticos del proveedor, así como sus instalaciones de almacenamiento; y el almacenamiento propio, se trata de almacenar en un determinado lugar los productos que se venden con ayuda de personal de la propia compañía.
Sin embargo, antes de elegir el sistema de logística más adecuado para las necesidades de la tienda online, es necesario tomar algunas decisiones en los siguientes aspectos:
El producto
Debido a que los atributos de un producto determinan su transportabilidad, la elección del canal de distribución se vuelve esencial para la satisfacción del consumidor, así que es un elemento que debe tener un cuidado especial.
La ubicación
Es claro que las formas de transportación depende del lugar donde la compañía tiene su centro logístico. No obstante, se debe evaluar los mejores métodos para entregar los productos en tiempo y forma. De acuerdo con Interactive Advertising Bureau (IAB), una de las razones de comprar en línea es el ahorro del tiempo (41 por ciento).
Las compras
Finalmente, la cantidad de pedidos, la disponibilidad y la frecuencia de envíos tiene un impacto en la eficacia de un modelo logístico. De tal manera que el uso de un intermediario de servicios de logística, es esencial para optimizar la distribución y mejorar la satisfacción del consumidor.
En México, por ejemplo, una de las razones para no comprar en línea es la duda acerca del envío (8 por ciento), falta de confianza en la tienda (34 por ciento) y en que llegue el producto (41 por ciento), según IAB México.
