En un entorno donde la tecnología es un factor preponderante, se hace cada vez más complejo el atraer la atención del público meta. A su vez, los tiempos para cautivar a los consumidores a través de publicidad no convencional son menores.
En tal sentido, la publicidad no convencional se enfrenta a los siguientes desafíos:
1.- Tener la capacidad de generar acciones verdaderamente innovadoras que asombren e impacten.
2.- Pensar en propuestas que serán vistas e inclusos probadas en otros países y continentes. Las marcas están optimizando los presupuestos de marketing, aprovechando producciones regionales y/o mundiales de comunicación y esto se debe capitalizar con acciones de BTL en el mercado local.
3.- Integrar todas las plataformas de comunicación al alcance, no separarlas o contraponerlas.
4.- Volver a las experiencias sensoriales y emocionales como el punto de partida del impacto en el público. No hay nada más racional que aprovechar el valor de los sentidos y de las emociones.
5.- Descubrir los momentos más importantes de decisión y necesidad de cada ser humano.
6.- La tecnología será fundamental en el diseño e implementación de las campañas, ya que estamos ante nuevos caminos que nos llevan a los consumidores. Los que logren entender mejor la relación entre tecnología y creatividad, destacarán.
7.- Generar ideas de marca que aporten valor a sus respectivas industrias y a la comunidad en que viven.
8.- Reconocer que las grandes ideas son el motor de la innovación, entender que cuestan y se requieren inversiones adecuadas para la implementación
9.- No inundar el mercado con pseudo experiencias de marca y esfuerzos de contenido sin valor y estrategia
10.- Entender que el consumidor busca tener relaciones estables con las marcas siempre y cuando lo escuchen, lo entiendan y le ofrezcan a cambio calidad de vida y aporten bienestar de manera significativa en su comunidad o entorno.